Ya conoces a las dark kitchens, ¿no? Son espacios de cocina comerciales para que las empresas relacionadas con la alimentación puedan utilizar las instalaciones y los servicios para preparar sus platos para el delivery. Son especialmente famosas entre los dueños de restaurantes que buscan expandir sus servicios de delivery a otras zonas de la ciudad o bien, abrir un restaurante nuevo con mínima inversión y menor riesgo.
Esto es diferente a una ubicación tradicional porque permite a los restaurantes y a las empresas de servicios alimentarios crear y ofrecer su comida sin muchos gastos generales.
Aunque seguramente has oído hablar de ellas, también es posible que hayas oído hablar de algunos mitos que las rodean. En este artículo, analizamos tres mitos de las dark kitchens y los desmentimos.
Mito #1: Se necesita una gran inversión
Un mito de los restaurantes virtuales es que hay que tener mucho dinero para una inversión inicial.
De hecho, eso no es cierto para nada. Puedes encontrar una dark kitchen para rentar que solo requiera una suscripción mensual y que no necesites comprometerte por más tiempo.
Es más, si ya tienes un restaurante físico, puedes utilizar tu personal actual, lo que reduce los costes de contratación y entrenamiento.
Una de las ventajas de las dark kitchens es que no tiene tantos gastos generales como en un restaurante tradicional.
Evita los costes de renta, las inversiones de capital exorbitantes y tener que comprar la decoración interior, como mesas y sillas, cubiertos, decoración y diseño.
Sólo tienes que crear tu menú, organizar las opciones de entrega, trasladarse a tu restaurante virtual, abastecerse de ingredientes y empezar a tomar pedidos. ¡Es todo!
Mito nº 2: Las dark kitchens no están situadas en el centro
Algunas personas tienen la idea errónea de que las dark kitchens suelen encontrarse en las afueras de la ciudad, son de difícil acceso y no están en las mejores condiciones.
En general, la mayoría de los restaurantes virtuales están situados en un lugar céntrico, por lo que son fácilmente accesibles por los repartidores y empleados por igual.
Los propietarios de este tipo de cocinas saben que deben facilitar el acceso a sus instalaciones. No quieren estar demasiado lejos de las zonas residenciales y comerciales. ¿Por qué? La comida estaría fría y la calidad no sería buena si la cocina estuviera demasiado lejos.
Mito #3: Las dark kitchens no son profesionales
Parece que hay gente que piensa que las dark kitchens no son “reales” o profesionales. Algunas personas piensan que estas cocinas no son válidas y que utilizan equipos y alimentos de baja calidad.
Esto no puede estar más lejos de la realidad. Muchas cocinas en la nube están dirigidas por restaurantes ya establecidos, mientras que otras están dirigidas por chefs experimentados que quieren ofrecer su comida a más gente. A final de cuentas, la comida sigue siendo preparada con la más alta calidad, ingredientes frescos, y por cocineros profesionales.
Ahora que ya conoces nuestros tres mitos de las dark kitchens y los hemos desmentido, ¿estás preparado para abrir la tuya? ¡Mándanos un mensaje!