El menú de tu restaurante y su propuesta gastronómica debe tener como objetivo satisfacer todos los sentidos del comensal y brindar una experiencia agradable desde el primer contacto, y aquí entra en juego el Food Styling.
Se trata de una tendencia que comprende que un delicioso platillo, una hermosa decoración y una buena atención al cliente no lo es todo en la industria culinaria. Para garantizar una experiencia inolvidable e integral hace falta un valor añadido más: el estilismo gastronómico.
Esto va más allá de que los platillos tengan un aspecto pulcro y cautivador una vez sean servidos. De hecho, empieza mucho antes: cuando una determinada receta es compartida o difundida al público objetivo por medio de una imagen, sea en un aviso en un lugar público o por medio de las redes sociales u otros medios digitales.
De esa manera, comienza – por medio de la vista – una experiencia sensorial que puede terminar con la visita al restaurante o un pedido de comida a domicilio.
Entonces, ¿qué es el Food Styling?
Es una tendencia que tiene como objetivo lograr que los platillos se vean apetecibles en las imágenes, alentando el consumo y cautivando al potencial usuario.
Al mismo tiempo, aporta prácticas y técnicas que permiten presentar el alimento con sentido estético al momento de servirlo al comensal.
En realidad, el estilismo gastronómico existe desde hace muchas décadas, pero en los últimos años se ha convertido en una tendencia y en un factor indispensable gracias a la entrada a la época digital.
Hoy, los restaurantes pueden convertir sus cuentas en redes sociales en dinámicos menús digitales, accediendo a un mercado numeroso y ágil.
En medio de esta competencia en el entorno web, el Food Styling es ese factor que puede marcar la diferencia para que un usuario decida comprar – por ejemplo – una hamburguesa en tu restaurante y no en otro negocio.
Y, ¿cuáles son los principios del Food Styling?
Para deleitar el público e impulsar las ventas de los negocios gastronómicos, el Food Styling tiene muy en cuenta diferentes principios, factores y puntos clave, como:
Que la “ficción” supere a la realidad
El Food Styling tiene que seguir principios éticos, por lo cual las imágenes deben ser de platillos que realmente existan y sean ofrecidos por los restaurantes.
Sin embargo, el objetivo de los “artistas” gastronómicos es lograr que la imagen del alimento sea incluso más tentadora y llamativa que como luce en realidad.
Por ejemplo, en el caso de las hamburguesas, se pueden utilizar alfileres para que luzcan más firmes de lo normal o hacer pequeñas ediciones de imagen para agregar brillo y esplendor al pan.
Volumen justo y necesario
Esta tendencia siempre apunta al buen gusto, por lo cual suele priorizar el minimalismo, bajo la premisa de menos es más.
En lo que respecta a volumen, busca que los platos se vean sustanciales y capaces de satisfacer el apetito del comensal, pero sin exagerar para que no pierdan la elegancia y sutileza.
Mantener la textura y matices
La ideal del Food Styling es hacer lo más real posible la imagen, para captar la atención del consumidor y, además, ganar su confianza.
Por ese, siempre busca conservar las texturas y matices de los alimentos, evitando un exagerado trabajo de edición que derive en una imagen muy artificial.
Entonces, ¿ahora sí comprendes de qué trata el Food Styling? Es una tendencia que conviene aplicar para destacar en el entorno digita y, además, cautiva al comensal en general.
No olvides que en la competitiva industria actual los detalles marcan la diferencia y, precisamente, en estos se fija el estilismo gastronómico.
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