La definición de precios en un servicio es algo que depende de varios puntos. Además de la mano de obra, hay que tener en cuenta factores como los costes de material y electricidad, entre otros. ¿Por qué, entonces, habría de ser diferente con las entregas en restaurantes? La tarifa del delivery necesita ser establecida de forma correcta y justa, garantizando la cobertura de los costes involucrados para llevar la comida al consumidor.
Aun así, hay que tener cuidado, porque este valor tampoco puede ser demasiado alto. Al fin y al cabo, un precio muy alto puede ahuyentar al cliente. Pero, ¿cómo llegar a esta definición sin perder entregas o traer costos innecesarios para quien solicitó el servicio?
Sigue leyendo y echa un vistazo a algunos consejos sencillos que te harán la vida más fácil y aportarán distinción a tu restaurante.
¿Por qué es necesario establecer un coste de entrega?
La entrega a domicilio es un servicio que ha ganado gran popularidad en los restaurantes, especialmente durante la pandemia de coronavirus.
Es necesario poder estipular una tarifa de entrega a domicilio. Al fin y al cabo, el restaurante tiene varios costes para garantizar que la comida llega en buenas condiciones al domicilio del consumidor.
Sin un cálculo adecuado, el establecimiento puede fijar una tarifa inadecuada, no pudiendo cubrir los gastos que conlleva y tener pérdidas.
¿Cuáles son los vehículos de reparto más habituales?
El reparto se realiza habitualmente en moto, que es un vehículo ágil, económico y de tamaño reducido, bastante cómodo para evitar problemas de tráfico y embotellamiento.
La desventaja de la moto es que no es tan segura como un coche. Sin embargo, existe un seguro para el profesional y el vehículo.
Otra opción es la bicicleta, que también es útil para el reparto, además de dar una buena imagen de sostenibilidad y bajo coste de mantenimiento. Sin embargo, al depender del esfuerzo físico del profesional, el área de cobertura de entrega acaba siendo menor.
El coche transporta más entregas a la vez porque es más grande. Sin embargo, no es muy ágil, consume más combustible y es susceptible de quedar atrapado en embotellamientos y problemas de tráfico. Por lo tanto, los gastos de envío son más caros.
¿Cómo se calcula el coste de entrega?
El cálculo de los gastos de entrega tiene en cuenta varios puntos importantes. Sigue los consejos que te damos a continuación.
Calcular el coste del transporte
El primer paso para definir el valor de tu entrega es tener en cuenta los gastos de transporte.
¿Qué tipo de vehículo se utilizará? ¿Y el combustible? ¿Hay un consumo medio o exagerado? Establecer relaciones entre estos factores es el punto de partida de toda la definición.
Evaluar la distancia recorrida
La distancia también cuenta. Al fin y al cabo, cuanto más lejos, mayor será el coste de realizar la entrega. Por lo tanto, hay que establecer radios en los que será válido un determinado valor que aumentará progresivamente a medida que crezca la distancia.
Se trata de un punto esencial para la optimización de tus servicios. Puedes utilizar una aplicación cartográfica para facilitar los cálculos, o establecer valores fijos para las localidades a las que sirve el restaurante.
Ten en cuenta la remuneración del repartidor
La persona encargada de intermediar en el proceso de compraventa, llevando el producto hasta el consumidor, también debe ser retribuida.
Independientemente de que este profesional sea contratado o subcontratado, como en el caso de las aplicaciones de pedidos por celular, es fundamental incluir en la tarifa una parte adecuada referida a los servicios del profesional. También hay que tener en cuenta el seguro y los beneficios para los empleados.
Observa el precio que cobra la competencia
Un buen consejo para fijar un precio justo es observar a la competencia y ver cuánto cobra.
De este modo, podrás poner cifras más atractivas a tus envíos, pero sin salir perdiendo por bajar demasiado los gastos de envío. De este modo, tanto tú como tu cliente saldrán ganando.
Evalúa el gasto de combustible por kilómetro
Para saber cuánto consume tu coche o moto, debes repostar y luego poner a cero el cuentakilómetros. Anota cuántos litros has llenado. Cuando se acabe el combustible, divide el número de kilómetros recorridos por el volumen consumido. La cifra resultante de esta operación es el consumo medio de combustible por kilómetro recorrido.
Para conocer la cantidad de combustible gastada para recorrer cada kilómetro, basta con multiplicar la media hallada por el precio del combustible. Recuerda que esta tarifa puede variar debido a la mayor inestabilidad del momento actual con los constantes cambios en el precio de la gasolina.
Ten en cuenta que hay cálculos mensuales y anuales
Los gastos como el pago del repartidor, el seguro y la distancia recorrida son mensuales. Los gastos del vehículo, como impuestos y documentos, son anuales.
Considera la posibilidad de calcularlos por separado. Después, define una media anual para cada uno de estos gastos. Al final, basta con dividir el coste total anual por el número de entregas realizadas al día.
¿Cómo puede ser el gasto de entrega gratuito una forma de conseguir más clientes?
Que los gastos de envío son un coste no es una novedad para nadie. Aun así, pensando en conseguir más clientes, mantener la tarifa de entrega como gratuita puede ser una gran estrategia de marketing y hacer que tu restaurante gane más dinero.
Al ofrecer entregas gratuitas, además de conseguir que más clientes accedan a tu menú de forma natural, más aplicaciones de entrega subirán tu restaurante en la aplicación.
Aunque esto disminuirá tu margen de beneficios, el volumen de ventas de las entregas aumenta. De esta forma, podrás negociar con proveedores (bajando tus costes de venta) y apps (mejorando tus tarifas).
¡Se trata de una estrategia de marketing! Piensa en aumentar ligeramente el precio de tus productos para cubrir la entrega gratuita.
Como vemos, la tarifa de entrega gratuita es mucho más que una tarifa de reposición de gasolina. Este factor es primordial para la calidad y rapidez del servicio prestado, garantizando la seguridad del restaurante, del repartidor y, por supuesto, ¡del cliente!
Por cierto, el cliente siempre tiene razón. Por lo tanto, es necesario estar siempre atento a los aspectos que pueden indicar satisfacción o insatisfacción y hacer las cosas de forma que agraden completamente al cliente, ¿verdad?
Con el cálculo adecuado, se puede determinar una tasa de entrega que sea favorable para el restaurante y no un problema para el consumidor.
¿Te ha gustado saber cómo calcular la tasa de entrega? ¡Comparte tu opinión dejando un comentario!